Los analistas privados consultados por el Banco de México (Banxico) redujeron su expectativa de crecimiento de México para 2016 de un 2.74 por ciento estimado en diciembre a un 2.69 por ciento esperado para enero. Para el próximo año también prevén una disminución en el Producto Interno Bruto (PIB) de un 3.29 por ciento calculado en diciembre a un 3.18 por ciento para enero.

Los especialistas consideran que los principales factores que podrían obstaculizar el crecimiento económico de México en los próximos meses son, en orden de importancia, la debilidad del mercado externo y la economía mundial (23 por ciento de las respuestas); la inestabilidad financiera internacional (18 por ciento de las respuestas); el precio de exportación del petróleo (13 por ciento de las respuestas); y los problemas de inseguridad pública (12 por ciento de las respuestas).

Respecto al tipo de cambio, las expectativas sobre los niveles esperados para los cierres de 2016 y 2017 aumentaron con relación a la encuesta precedente de 16.79 pesos por dólar estimados en diciembre a 17.60 pesos para enero de 2016.

Aunque las expectativas de inflación general para el cierre de 2016 disminuyeron en relación a la encuesta de diciembre: de un 3.32 por ciento estimada en diciembre a un 3.10 por ciento en enero de 2016, los analistas consultados ya la sitúan por arriba del objetivo de un 3 por ciento.

Las referentes al cierre de 2017 se mantuvieron constantes en 3.31 por ciento.

Asimismo, la fracción de analistas que espera que la economía esté mejor que hace un año disminuyó respecto a la encuesta anterior y se ubica en un poco más de la mitad del total. El porcentaje de especialistas que considera que es un buen momento para invertir disminuyó en relación al mes previo, al tiempo que la proporción de analistas que no están seguros sobre la coyuntura actual aumentó y es la predominante en la presente encuesta.