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La regidora del PRI Maribel Chollet Morán calificó como una negligencia por parte del Ayuntamiento de Mazatlán haber desviado el cauce del arroyo Jabalines sin contar con estudios técnicos ni la autorización de la Comisión Nacional del Agua, lo que representaría un riesgo latente para las colonias aledañas.
Señaló que este tipo de decisiones, ejecutadas sin respaldo legal ni técnico, evidencian la falta de responsabilidad de la autoridad municipal, ya que una modificación de esta magnitud podría provocar inundaciones en la temporada de lluvias.
“No solamente hay una gran afectación, hay un impacto, efectivamente, hay un grave riesgo, estamos en una temporada en la que se anuncian cinco huracanes, en donde las lluvias están provocando que se esté desgajando más la contención que existía, desviaron el cauce natural de ese arroyo”, expuso.
La edil informó que fue parte de una reunión sostenida con el propietario de un predio afectado por el desvío del arroyo, así como con vecinos de las colonias Labastida, Ochoa y Huertos Familiares, quienes expresaron su preocupación ante la posibilidad de que el cambio en el cauce natural incremente los riesgos para sus viviendas.
Lo más lamentable, agregó, es que en dicha reunión no estuvo presente ningún integrante de la Comisión de Urbanismo, Ecología y Obras Públicas del Cabildo, que son quienes deberían estar dando la cara y atendiendo este tipo de problemáticas.
“Yo quisiera dejar muy en claro que los vecinos y los demandantes, propietarios afectados, tienen las pruebas y los elementos suficientes como para no considerar que fue simple y sencillamente un error”, dijo.
La regidora recordó que existe un antecedente legal en el que el ex alcalde Alejandro Higuera Osuna y su entonces secretario del Ayuntamiento, Pedro Osuna Amparo, fueron detenidos por incurrir en una falta administrativa menor a lo que actualmente se está haciendo con el arroyo Jabalines.
Para saber
Por presuntamente desviar el cauce natural del arroyo Jabalines sin contar con los estudios técnicos ni la autorización correspondiente de la Comisión Nacional del Agua, el Ayuntamiento de Mazatlán enfrentan una demanda legal en contra.
La denuncia fue interpuesta por el ciudadano Gerardo López Del Río, quien afirma que la obra afectó directamente un predio de su propiedad de 5 mil metros cuadrados.
El nuevo trazado del arroyo se ejecutó en el tramo comprendido entre la avenida Óscar Pérez Escobosa y la avenida de las Torres, donde originalmente el cauce hacía una curvatura natural, con la intervención, el flujo del agua fue rectificado, modificando por completo su trayectoria.