El PRI tiene que regresarle al pueblo de Chihuahua el dinero que César Duarte le robó al pueblo de este estado, por tres razones: la primera es que la Ley General de Partidos Políticos prohíbe recibir dinero de los gobiernos; la segunda es porque el PRI tiene que dejar de ser cómplice de sus funcionarios y, la tercera, es porque corrupto es también quien recibe y Enrique Ochoa debe de regresar ese dinero que es producto de la corrupción”, sostuvo.
Además de que durante la administración de Duarte, 800 empleados se vieron afectados por que se retuvo, de manera ilegal, el 5 por ciento del salario, y la suma (100 millones) fueron enviados al PRI.
López Martín dijo que solicitará a la Comisión de Fiscalización del Instituto Nacional Electoral (INE) la eliminación del secreto fiscal y bancario para Duarte, con el fin de que se puedan agilizar las investigaciones.
“Afortunadamente la norma electoral es rigurosa en esta materia y existen las herramientas para rastrear cada peso que Duarte les robó a los chihuahuenses y vamos a pedir que se determine a través de una auditoria que identifique el paradero de los impuestos que pagaron estos ciudadanos con tanto esfuerzo y que Duarte puso en manos del PRI”, manifestó.