Este 14 se festeja a los santos y santas Afrodisio, Eutiquio, Matilde reina, y Florentina.

l nombre de Matilde procede del germánico Maht-hild: “guerrero(a) fuerte”. Está muy difundido entre los países germánicos, porque ahí florecieron grandes personajes con ese nombre. Estuvo muy de moda durante la alta Edad Media en Europa, sobre todo en Alemania y en Francia. Volvió a renacer la tradición del nombre durante el siglo XIX. En nuestro siglo decayó en un principio y, a partir de los años setenta, ha penetrado en niveles selectos. Tiene diversas variantes como Matilda, Mectilda, Mechtildes (que son formas antiguas), Mahalta, Maud y Mafalda.

Santa Matilde reina de Alemania, esposa de Enrique I y madre del emperador Otón I el Magno, nació en Engern (Westfalia) el año 895. El duque Otón de Sajonia la pidió en matrimonio para su hijo Enrique. Se celebró el enlace en Walhausen, el año 909, cuando Matilde tenía 14 años. Para ella reinar era ocuparse maternalmente de los enfermos, a quienes visitaba asiduamente, y socorrer a los pobres, a quienes servía ella misma. Fundó hospitales, iglesias y monasterios.

Todas las mujeres que tiene en su nombre el vocablo germano hild (Hilda, Hilda Elisa, Brunilda, etc.) son fuertes, como su raíz significa. Algunas otras, son también guerreras, aunque no necesariamente en el sentido etimológico.