La Noria: un pueblo lleno de magia, colorido y tradición

Es la tierra de la talabartería y el destilado de agave

A media hora de Mazatlán, se encuentra La Noria, un pueblo lleno de magia, de colorido y tradición.

Es el hogar de varios artesanos especialistas en la talabartería, que con sus manos elaboran objetos de piel, tales como huaraches, cinturones, bolsas o sillas de montar.

Uno de ellos es Juan Antonio Salas Lizárraga, quien aprendió del oficio por su padre. Hoy lleva 35 años como talabartero.

“Soy la tercera generación en la familia, la talabartería la inició mi abuelo y le siguió mi padre, y pues ahora yo estoy al frente. Mi trabajo es hacer huaraches, cintos, bolsas y otros detalles que se llevan los turistas que nos visitan. A ellos les gusta mucho porque nos ven en el momento en que estamos elaborando los productos”, dijo.

La Noria es la tierra del destilado de agave azul por la vinata Los Osuna, cuyos productos son reconocidos a nivel internacional en países como Estados Unidos y Canadá.

“Estamos desde 1876, ya es la quinta generación de la familia Osuna, originaria de La Noria; son 142 años elaborando este destilado de agave de la misma manera, conservando la fábrica con un proceso artesanal y tradicional”, dijo Luis Daniel Limón Haro.

El gerente de Producción de Vinata Los Osuna indicó que la empresa continúa impulsando la generación de empleos y el desarrollo económico no sólo de La Noria, sino del puerto de Mazatlán.

Puntualizó que actualmente se trabaja para entrar al mercado europeo, por lo que se espera posicionar la marca en otros continentes.

En el poblado se formó un frente común para mejorar la imagen del lugar y así atraer más turismo nacional y extranjero.

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